El transporte por carretera es uno de los más comunes a la hora de trasladar mercancías de un punto a otro, ya sea por el ahorro económico que supone, por la permisividad a la hora de hacer cambios en la ruta, o por la capacidad de rastrear dicho envío, el cual supone una ventaja tanto para la empresa como para el cliente.

Aunque este transporte pueda llegar a cualquier parte del mundo, es el más ideal a nivel nacional o de territorios adjuntos, y no tan popular a nivel internacional por sus altos cargos y larga espera. Asimismo, este último suele descartarse en casos de envíos urgentes, altos aranceles o tipología especial de mercancía.

Las ventajas de este tipo de desplazamientos varían desde sus bajos precios, su agilidad, su rapidez, su servicio puerta a puerta, su fácil papeleo hasta su capacidad de transporte de mercancías más delicadas o peligrosas. Sin embargo, también hay que tener en cuenta su menor capacidad de carga, la posible alteración del horario de su ruta debido al tráfico o su alto nivel de siniestralidad, comparado con otros métodos de transporte debido a la carretera.

Consejos para un transporte de mercancías por carretera seguro

Para un transporte seguro de mercancías por carretera es imprescindible llevar a cabo las siguientes recomendaciones:

1.      Revisión del vehículo

Antes y después de realizar cualquier desplazamiento, es importante llevar controles periódicos del camión para asegurar su correcto funcionamiento y así evitar al máximo posible siniestros o accidentes que puede deparar la carretera o la naturaleza.

2.      Cumplimiento de los tiempos de conducción

Este consejo va de la mano del anterior, pero con relación al cuidado del transportista. Este debe asegurarse de detener el vehículo según los tiempos establecidos por la Dirección General de Tráfico –DGT— y cada vez que padezca síntomas de cansancio o agotamiento.

3.      Vigilancia al volante

Esta advertencia va dirigida al comportamiento del transportista tras el volante, quien no deberá, bajo ninguna circunstancia, llevar a cabo alguna actividad –como utilizar el móvil— mientras el vehículo está en marcha y circulando, pues debe enfocar toda su atención en la carretera.

4.      Planificación de ruta

Planificar una ruta de antemano puede asegurar una mayor seguridad para el transportista y un desplazamiento más rápido, además de que garantiza una organización que afecta positivamente a la gestión y el funcionamiento de la actividad de la empresa.

Sin lugar a duda, el transporte de mercancías por carretera es el que más factores tiene a su favor gracias a su agilidad y economicidad y, llevado correctamente a cabo, es de los más efectivos y populares.